Ciudad de México, 24 de febrero, 2024- Rumbo a su doceavo aniversario y al primer examen de mujeres para certificarse como juezas, Catadoras y Cerveceras de México (CCM) vuelve al origen y va con todo en la promoción de la cheve en cada ciudad del país. Encabezadas por Osvelia Vargas, este año su objetivo es sumar a más mujeres en el grupo y fortalecer su profesionalización.
Actualmente, más de 3 mil 100 mujeres de todo el país y algunas ciudades del extranjero, están en el grupo, de las que 53 son coordinadoras en sus respectivas ciudades. Tijuana, Ensenada, Mexicali, Guadalajara y Ciudad de México, tienen la mayor presencia de catadoras.
Fundado en 2012 por Yadira Espinoza y Kathy Pedrín, CCM se dedica a la promoción de la cultura cervecera, y gracias a su trabajo ha logrado abrirse camino en la industria posicionándose como una de las agrupaciones de mujeres más representativas, con presencia en eventos nacionales como Expo Cerveza México.
En diciembre de 2023, Osvelia Vargas fue elegida como presidenta de catadoras en sustitución de Yola Bardales (Pachuca). Osvelia es de Hermosillo, Sonora, y es parte del grupo desde hace ocho años.
Fundó el grupo en Hermosillo en donde a la fecha hay 22 integrantes, además, dirige una tienda de insumos para elaborar cerveza, es beer sommelier por AMEG, jueza BJCP en cerveza e hidromiel y Cicerone Beer Server.
“Uno de nuestros principales objetivos hacer más ruido en nuestras ciudades, volver a los orígenes de Catadoras y ayudar a los cerveceros locales. Queremos realizar más eventos mensuales para aumentar el alcance y promoción de la cultura cervecera, habíamos dejado de hacerlo por la pandemia y se nos hizo difícil retomarlo”, expuso en entrevista con Desde la Barra.
El segundo objetivo de su gestión que durará dos años, es la profesionalización de la mujer en la industria cervecera. Ya desde septiembre de 2023 iniciaron un círculo de estudio para certificar a más catadoras como jueces BJCP, se inscribieron alrededor de 27 y el curso estuvo a cargo de Elba Copado, mujer pionera en la producción de cerveza en el país.
En CCM seis de sus integrantes tienen certificación BJCP y el próximo 23 de marzo, en el marco del aniversario de Catadoras y del Ensenada Beer Fest, 12 presentarán el examen práctico. Cabe mencionar que es la primera fecha de examen en la que participarán sólo mujeres, Vargas adelantó que próximamente se abrirán más grupos de estudio para juez BJCP de cerveza e hidromiel.
El tercer objetivo de Osvelia es llevar a Catadoras de 3 mil 100 a 5 mil integrantes en el grupo, y aumentar el número de coordinadoras en estados donde nunca han tenido presencia como Tamaulipas, Nayarit y Durango, y en los que el puesto quedó vacante como Quintana Roo.
“No importa tanto el número, lo que importa es que trabajemos, hay que movernos, captar mucha más gente y a lo mejor de esas 3 mil 100 pasamos a unas 5 mil. Queremos llegar a las ciudades en donde no tenemos coordinadoras, ese va a ser un reto grande para estos dos años que voy a estar como presidenta”, indicó.
En el extranjero, CCM tiene presencia en San Diego y Boston y mantiene la convocatoria abierta a todas las mujeres que deseen ser parte.
Además de Osvelia, el comité 2023-2025 de catadoras está integrado por Kathy Pedrín (Ensenada), es la cofundadora y se encarga del diseño, Patricia Vázquez (Tlaxcala), como secretaria, María Galindo (Puebla) es coordinadora de comisiones y Raquel Fentanes (Atlixco, Puebla) es tesorera.
El trabajo del comité será fundamental para mantener a catadoras como uno de los grupos más fuertes en la promoción de la cerveza artesanal en cada una de las ciudades en donde tiene presencia, y abrirse paso en donde no.
Hay más apertura para las mujeres
Hace ocho años que Osvelia se propuso reunir a un grupo de mujeres para promover la cerveza en Hermosillo, no la tuvo fácil. Además del escaso número de cerveceros locales, eran pocas las chicas que asistían a más de un evento.
“Siempre les digo a las chicas nuevas que sé cómo es sentirse insegura, tener miedo de lanzarte porque no sabes cómo será la aceptación, es algo que a ti te gusta y lo vas a hacer porque tú eres la apasionada. Es muy difícil y más cuando estás en una ciudad que va iniciando en la cuestión de la cerveza artesanal, es muy difícil captar la atención y más cuando eres mujer. Qué bueno que perdí el miedo y la vergüenza, fue un reto romper todos esos tabúes, me siento muy bien de haberlo logrado”, dijo.
Para Osvelia el papel de Catadoras es fundamental en el crecimiento del movimiento cervecero, ya que son quienes se encargan de introducir a los consumidores al mundo de las artesanales.
“Somos el contacto con la gente, para que conozca el estilo y se atreva a probar. A lo mejor un cervecero hace muy buena cerveza, pero no tiene ese contacto con la gente y ahí entramos nosotros. Lo veo en festivales en Hermosillo, Guaymas, Obregón, cuando la gente se acerca y dice ‘no sabía eso, ¡qué padre!’, y empiezan a tener esa interacción”, detalló.
DLB: De que iniciaste a la fecha, ¿cómo sientes el ambiente para las mujeres y en general alrededor de la cerveza artesanal?
OV: Como mujer fue difícil la aceptación con los cerveceros, ahora hay más apertura e integración, nos voltean a ver, nos dan nuestro lugar, por ejemplo, tengo lista de lugares y programado hasta mayo para catas, nos buscan porque jalamos gente y mi seguridad me ayuda a que exista esa apertura, porque me preparé.
En cuanto a la cerveza, ha crecido muchísimo, hablando regionalmente (cuando empecé) eran muy poquitos cerveceros y unos ya no están, los de esta nueva generación son muy jóvenes, algunos comenzaron en pandemia y vienen con todo, con nuevos estilos y tienen más apertura, también hay mujeres involucradas, de las que tres producen cerveza.
Por el lado de la tienda de insumos me toca ver que muchos jóvenes que estudian química están investigando sobre la cerveza, siento que esto ha evolucionado y crecido, un tiempo lo sentí estancando, y de pandemia no hablemos, pero ahorita creo que va en despunte.
El futuro de Catadoras
En catadoras también hay una nueva ola de mujeres de 22 a 25 años, que se han sumado a sus filas, algunas porque laboran en alguna cervecería, y tienen el interés de promover la cerveza en su localidad.
“Van a los eventos, les gusta, estamos dejando este legado a chicas que traen nuevas ideas, son muy movidas y no tienen miedo. Las que llevamos años aquí, sabemos que vamos a dejar el movimiento, pero seguiremos apoyando por fuera”, sostuvo.
*Imágenes cortesía de Catadoras