Ciudad de México, 08 de mayo, 2021- Son deliciosos, muy refrescantes, pero sobre todo peligrosamente fáciles de beber. Y es que podrían confundirse con una soda (pero más ricos), el alcohol no se percibe en nariz, ni en boca, ‘entran como agua’, aunque todos tienen entre 4 y 5 grados (rango de la mayoría de las cervezas industriales).
La moda de los hard seltzer llegó a las cocinas de las cervecerías artesanales mexicanas, su fabricación es similar a la de la cerveza, con la variante de que no existe maceración, ya que en esta bebida no se emplea malta y además se utiliza una levadura especial de alta gravedad.
Aunque aparecieron en 2013 en Estados Unidos, el boom de estas bebidas se presentó hasta 2019 en ese país y al año siguiente comenzaron a fabricarse en México por compañías como Heineken (Pura Piraña y Amstel Ultra), Grupo Modelo (Michelob Ultra Hard Seltzer) y Coca-Cola (Topo Chico Hard Seltzer).
El marketing de los HS está dirigido a jóvenes y personas con dietas bajas en calorías y en busca de productos naturales.
Sin embargo, como ocurre entre cervezas industriales y artesanales, las diferencias comienzan a develarse desde que destapas una lata y tu nariz registra las primeras impresiones (natural, artificial).
La clave, como pasa con las cervezas, está en la calidad (y cantidad) de los ingredientes.
Los artesanales le entran al negocio de los seltzer
Cerveza Cardera es una de las fábricas artesanales que ya comenzó a producirlos. En días pasados estrenó tres presentaciones: raspberry con hierbabuena, limón pepino y pink lemonade, todos con 4.5% ABV, 100 calorías y en presentación de 355.
En entrevista con Desde la Barra, Armando Cárdenas, co-fundador y cervecero de Cardera, dijo que las principales diferencias entre los seltzer crafts y los de las marcas industriales, es que los primeros se producen con fruta natural y están libres de conservadores y ácidos, por lo que de preferencia deben almacenarse en frío.
Para sus primeros lotes, de 3.5 BBLs por HS, Cardera utilizó alrededor de 50 kilos de frambuesa del Valle de San Quintín (la misma que usan para Berrinchuda, una de sus cheves más populares) y una cantidad similar de limón y pepino (25 y 25 en el seltzer combinado).
Y aunque su producción es menos costosa que la de una cerveza, aumentan el costo de operación, ya que su fermentación es de 21 días, mientras que la mayoría de sus cervezas están listas en dos semanas.
Dice Cárdenas que el envasado y etiquetado de sus hard seltzer, es 6 centavos de dólar más caro que el de sus cervezas. Todos estos factores impactan en el precio final que es de 35 más IVA, (41 pesos), mientras que los de las grandes marcas oscilan entre 20 y 25.
Se beben y venden ‘como agua’
“A todos les han gustado”, comenta Cárdenas sobre sus hard seltzers, que se están vendiendo a la misma velocidad de sus cervezas más populares.
El favorito de ‘Mr. Cardera’ es Pink Lemonade (le damos la razón, aunque el pepino-limón le pisa los talones). Antes de producirlos, Armando probó los seltzer que están en el mercado y comenzó a diseñar sus propias recetas.
“Es más fácil venderlos, a muchos jóvenes les están gustando”, sostuvo.
Los hard seltzers son parte del programa de innovación de la cervecería ensenadense, que realiza lanzamientos de nuevos productos cada mes.
¿Qué hace tan especiales a los hard seltzers?
1 Están de moda
2 Son bajos en calorías (tienen 100 o menos)
3 Tienen poco alcohol, ideales para los que buscan algo ligero
4 El tipo de lata (sleek) y coloridos diseños (la mayoría sobre fondo blanco) los distinguen del resto de bebidas alcohólicas
La prueba de sabor
Después de bebernos un Pura Piraña Toronja, Amstel Frambuesa-Té Negro y Michelob Limón-Pepino, concluimos que si vamos a cambiar una cheve (artesanal o no) por un HS, tiene que ser artesanal.
1 El aroma de los HS craft es delicioso
2 Saben a la fruta natural
3 El alcohol no se percibe (hasta después de unos minutos de beber la última gota)
¿Cuál es tu hard seltzer favorito?
*Imágenes Lupulina
