Ciudad de México, 04 Noviembre, 2019-Hace un mes que la planta y tasting room de Cervecería Insurgente en Tijuana fueron clausurados por autoridades municipales, situación que afecta a más de 30 empleados de un de las fábricas de cerveza artesanal más emblemáticas del movimiento cervecero en México.
Iván Morales, co-fundador de la marca, dijo que ante el cierre que este martes cumple un mes, solicitan el apoyo de la comunidad cervecera. Al respecto, el presidente de la Asociación de Cerveceros de Tijuana, Raúl Funes, demandó al municipio una explicación puntual sobre la clausura de Insurgente.
“Los apoyamos en todo sentido y demandamos a todos los niveles de gobierno una explicación, no es posible que se nos diga que es por incumplimientos no graves, para los cuales se levanta simplemente un acta”, expuso Funes.
Insurgente produce alrededor de 45 mil litros mensuales y además de Baja California, tiene presencia en casi todos los estados del país, especialmente Ciudad de México y Jalisco. De igual forma, exporta su cerveza a California.
Iván reveló que en este momento se encuentran maquilando, para garantizar al menos parte de la demanda. Comentó sentirse molesto por la situación que atraviesan, pero aseguró que están preparados para continuar produciendo hasta por cinco años o el tiempo que sea necesario fuera de sus instalaciones.
Precisó que el cierre no frenará la inauguración de su tap room en la calle Juárez (Centro de Tijuana), que se llevará a cabo antes de que concluya el año.
Por su lado, Funes informó que el jueves tendrán una conferencia de prensa en Tijuana, para externar su postura
El comunicado
Hace unas horas, Insurgente publicó un comunicado en sus redes sociales, en el que aseguró que toman las medidas necesarias para cumplir con las observaciones y exigencias que les señaló el municipio.
Agradeció el apoyo y paciencia de seguidores y clientes en México y el extranjero.
Insurgente, un ícono de la cerveza en Tijuana
Hace casi una década los hermanos Damián e Iván Morales conocieron la cerveza artesanal en San Diego, donde sus paladares experimentaron los sabores de una sour, saison, stout y gran variedad de ipas, estilo que años más tarde se convertiría en su cerveza insignia.
Animados por el movimiento de la capital mundial de la cerveza, los Morales comenzaron a producir su propia ‘cheve’ en casa, tomando información de todas las fuentes posibles: libros, videos y de los propios cerveceros.
Una american amber ale, fue la primera cerveza que cocinaron juntos, Damián recuerda que tiraron ocho lotes seguidos, pues estaba lejos de lo que deseaban reproducir. Belgian Dubbel fue el primer estilo aceptable que crearon y durante ocho meses no pararon de experimentar en un equipo que apenas les permitía cocinar 20 litros.
Hicieron su debut en 2010 en un Oktobefest y cinco meses después en el Ensenada Beer Fest ganaron sus primeras medallas. Iván y Damián tuvieron la certeza de ir en el camino correcto.
“Nuestra visión era ofrecerle a la gente en México una cerveza que en ese entonces no existía. Queríamos entrar proponiendo otras cosas, por eso el nombre de Insurgente, hacer esa lucha contra el duopolio, esos poderes que parecen invencibles que han dominado los paladares”, sostiene Iván.
Dos años después Insurgente se anotó a la competencia profesional Cerveza México y ganó oro con Lupulosa, plata con Brown y bronce con Nocturna. En 2013 Lupulosa obtuvo plata y 2014 fue su año, al coronarse como la mejor cervecería de México y la mejor cerveza de la competencia con su IPA.
Nocturna (Black IPA) y Santa’s Red (Imperial Red Ale), fueron las siguientes cervezas en producir. Y con el paso de los años la lista se vuelve más amplia: cervezas experimentales, de temporada y otras que han llegado para quedarse como las de su serie Tap Room (Búho Rompeolas/ Hoppy Wheat, Sospeso IPA/ Coffee IPA, Berry Brown/ Brown Ale con moras y Born to be Mild/ Mild Ale), así como Juan Cordero (Pale Ale) y Sancho (Kölsch).
Atreverse a romper esquemas, fue el primer reto de Insurgente. Entonces comenzaron a educar sobre cerveza. “Las claras son ligeras y las oscuras fuertes”, es una de las ideas con las que se enfrentaron y actualmente lo siguen haciendo. La marca también se encarga de capacitar a meseros de los puntos de venta donde está su producto, para que puedan recomendar maridajes adecuados.
“Forzamos la cerveza a los paladares que nunca había probado algo así, empezando por nosotros, fue dándole duro en términos de ir a la gente y explicarle”, refiere Damián.
Así es como el mercado de Tijuana creció junto a Insurgente, ambos decidieron ir más allá de lo establecido y explorar el basto mundo de la cerveza independiente, al punto de que Lupulosa se convirtió en su cheve más pedida.
Calidad y consistencia son los argumentos más fuertes de esta marca, “nunca vendimos una cerveza que no fuera buena”, dice Damián y si alguna llega al mercado en malas condiciones, debido a su manejo, se retira.
El tasting room en Juan Cordero
Hace cinco años Insurgente construyó el edifico que alojaría su planta de producción en Tijuana, pero también un tasting room que se concretó a finales de 2018.
La falta de capital propio demoró el proyecto, debido a que las ganancias de Insurgente únicamente se reinvertían en más producción, originada por la creciente demanda de la marca en todo el país.
El tasting room tiene una capacidad de 150 personas, se divide en dos niveles y cuenta con dos barras de 24 taps cada una. Su planta de producción está en el primer piso, en el segundo se ubica la primera barra, un espacio para degustar y una pequeña terraza. El tercer piso es una azotea que cuenta con bancas similares a las de su ex tasting en Plaza Fiesta y otra barra con la misma oferta de cervezas que la del segundo piso.
Entre sus planes estaba habilitar un espacio en el primer nivel para instalar cocina y una tercera barra, que aumentaría el cupo hasta 200 personas, aproximadamente.
Y es que la cervecería piensa en expandirse y mudar su planta a la zona industrial, dejando en su ubicación en Juan Cordero sólo cervezas de especialidad y en barril para surtir el tasting.
Tiniebla, Lupulosa y Juan Cordero: las cheves emblemáticas
Las dos primeras han sido representativas en la historia de la marca, mientras que la tercera se posicionó rápidamente en el gusto de los consumidores y se sumó a las tres más vendidas de Insurgente, que desde abril de 2018 se cocinan en un tanque de 45 BBLs.
*Imagen de portada cortesía de Beer Lovers TJ
*Imágenes cortesía de Insurgente