Astral, una cerveza para los que aman la fiesta

Ciudad de México, 11 de marzo, 2022- Inspirados en la fiesta y los sonidos de la electrónica, Pedro Huato y Diego González, crearon Cervecería Astral, cuya imagen y sabores, están relacionados con lo abstracto y clásico.

Elaborada en Guadalajara, Jalisco y pensada en los sabores de la vieja escuela, Astral es una nueva propuesta cervecera que hace su lanzamiento oficial con el destape de uno de sus 2 estilos de línea, una Pale Ale llamada Ascenso.

Astral

El viaje ha comenzado

Inició cuando Pedro destapó su primera cerveza artesanal, una Stout de Cervecería Calavera, tenía 15 años y vivía en Uruapan, a los 17 cocinó por primera vez en casa, 100 litros de una cerveza que recuerda como ‘basura intomable, de la que aprendí un montón’.

Animado por la producción de cerveza, eligió estudiar ingeniería en alimentos en Guadalajara, también pasó un verano en Cervecería Tépoli, ahí confirmó que la cheve era lo suyo, y sus prácticas profesionales las realizó en Naipe (Guadalajara).

Luego se mudó a Chicago para trabajar en una empresa de sabores, en donde estuvo 2 años en investigación y desarrollo de bebidas, mientras cursaba el diplomado de ver sommelier de AMEG.

Astral

En el diplomado, Pedro conoció al primo de Diego, se volvieron muy amigos y así fue como encontró a quien sería su futuro socio.

“La amistad fue creciendo y en una carne asada en su casa le dije que estaría chido hacer juntos el proyecto, yo en la parte técnica y él en ventas”, recuerda.

Pasaron 9 meses para que se hiciera realidad. Durante ese tiempo, analizaron su viabilidad, Diego probó las cervezas elaboradas por Pedro y les tomó seis meses definir el nombre y concepto de la marca.

“Le dimos vuelta como a 60 conceptos diferentes y nada nos gustaba, es complicado llegar a un punto medio, tenemos la ventaja de que nos gusta la fiesta, la música electrónica, lo abstracto y minimalista, y de ahí le fuimos buscando”, refirió.

Astral

Incluso, el logo de Astral está basado en el concepto de After Life, una firma de DJs cuyo concepto gira en torno a lo abstracto.

Por el momento, Astral maquila su cerveza en Guadalajara, y además de la Pale Ale cuenta con una Munich Helles, Pedro es el autor de ambas recetas.

Pero en sus planes contemplan tener su propia fábrica, “lo tenemos muy en mente, porque nos estamos llamando cervecería y no tenemos una planta, hay que ser congruentes entre lo que nuestra marca dice con lo que tenemos, empezar con una planta y jugártela a ver si pega es algo arriesgado, pero es nuestra meta a mediado plazo y si esto jala chido, a corto”.

El aprendizaje

En Tépoli, Pedro aprendió a crear recetas, estudió los estilos e ingredientes, mientras que en Naipe se enfocó al cuidado de la cerveza, desde la molienda, hasta que sale de la fábrica.

Ambos aprendizajes, más sus estudios, lo llevaron a definir los perfiles de las cervezas de línea de Astral, inspirados en la old school y el west coast. Son cheves para todos los paladares.

Astral

“Estos estilos de línea salen para tratar de abarcar lo más que se pueda del mercado y tenemos en mente ediciones especiales a lo largo del año, así como una serie de cervezas con más reto técnico que saldrán un par de veces al año, con ellas haremos un homenaje a diferentes personas en nuestras vidas”, expuso.

Las beer cups

Para Astral es importante obtener la retroalimentación de jueces calificados, es por ello que incluso antes de su lanzamiento se inscribieron a la Copa Cervecera de Pacífico y lo seguirán haciendo en diferentes justas cerveceras a lo largo del año.

“Nuestras cervezas de línea son muy clásicas y creo que la tendencia cervecera se está yendo hacia experimentos y cosas raras, que a veces resultan muy mal hechas, eso hace que la gente olvide lo que es un estilo base. Confío en el trabajo técnico que hemos hecho, para entrar a competir, y que validen nuestras cervezas como referentes de un estilo tradicional”, dijo.

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*Imágenes cortesía de Astral Cervecería

Anabel Manzano "Lupulina"

Anabel Manzano "Lupulina"

Siempre le gustó contar historias y un día descubrió que ser periodista es el mejor trabajo del mundo. En el camino se encontró una pinta de cerveza artesanal y fusionó sus dos pasiones en Desde la Barra.
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